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martes, 16 de octubre de 2012

Masih Dajjal (Falso Mesias)



LA TRIBULACIÓN DEL FALSO MESÍAS
(Fitnah Ad Dayyál)

Su aparición será la más grande tribulación en la historia de la humanidad.

La tribulación del Dayyál ocurrirá al final de los tiempos, y será una de las señales mayores de la Hora. Su Fitnah (tribulación) será una de las más grandes tribulaciones en la historia de la humanidad. En Sahih Muslim se narra que Abú Ad Dama  y Abú Qatádah  dijeron:

Nosotros pasábamos cerca de Hishám Ibn `Ámir en nuestro camino hacia 'Imrán Ibn  Husain. Un día (Hishám) nos dijo: ‘Vosotros pasáis cerca de mí para ir a otros hombres que no estuvieron más tiempo con el Mensajero de Allah   del que yo estuve, y no son más conocedores sobre su Hadiz que yo. Yo oí al Mensajero de Allah (salla Allahou alayhi wa salam) decir:

“Entre la creación de Adán y el comienzo de la Hora no habrá ninguna creación mayor que el Dayyál." Según otro informe: "No habrá ninguna cuestión más seria que el Dayyal.” Por esta razón, todos los Profetas advirtieron a sus pueblos acerca de su tribulación, pero nuestro Mensajero (salla Allahou alayhi wa salam)  fue el que advirtió más detalladamente a su nación.

En Sahih Al Bujári se narra que Abdullah Ibn 'Omar dijo:

El Mensajero de Allah (salla Allahou alayhi wa salam) se puso de pie y alabó a Allah de la manera que Él merece ser alabado, luego mencionó al Dayyál y dijo:

“Yo os advierto sobre él. No hay Profeta que no haya advertido a su gente sobre él, pero yo os diré algo que ningún otro Profeta ha dicho alguna vez a su gente: él es tuerto y Allah no es tuerto.” 

En Sahih Al Bujári y Sahih  Muslim, se narra de Anas (radeya Allahou anho)   que el Profeta  (salla Allahou alayhi wa salam) dijo:

“No hubo Profeta que no advirtiera a su nación sobre el mentiroso tuerto; él es tuerto, pero vuestro Señor no es tuerto, y entre sus ojos esta escrito ‘Káfir’." 

En Sunan At Tirmidhi y Sunan Abu Daud se narra de Abdullah Ibn `Omar  (radeya Allahou anho) que el Mensajero (salla Allahou alayhi wa salam)  dijo acerca del Dayyál:

“Yo os advierto sobre él, pues no hubo Profeta que no advirtiera a su gente sobre él. Núh advirtió a su gente sobre él. Pero yo os diré algo que ningún Profeta le ha dicho alguna vez a su gente. Vosotros debéis saber que él es tuerto, pero Allah no es tuerto.”

En Sunan Ibn Máyah, Sahih Ibn Juzaimah y Mustadrak Al Hákim, se narra de Abu Umámah (radeya Allahou anho) que el Profeta(salla Allahou alayhi wa salam)  dijo:

“¡Oh gente! No ha habido tribulación en la faz de la Tierra , desde que Allah creó a la humanidad que sea mayor que la tribulación del Dayyál. Allah no ha enviado Profeta que no haya advertido a su nación sobre el Dayyál. Yo soy el último de los Profetas, y vosotros sois la última de las naciones. Él surgirá indudablemente de entre vosotros."

Que Allah nos proteja  y nos  aleje del Dayyal


La razón por la que es llamado Al Masíh Ad Dayyál  
(el falso Mesías)

Ibn Al Azir dijo:

‘‘El Dayyál es llamado Masíih porque uno de sus ojos ha sido ‘borrado’ o ‘limpiado’ (mamsüh) de su rostro[una forma alegórica para significar que a éste le falta un ojo],
a diferencia del título Masíh (Mesías) de ‘Isa  Ibn Mariam que es llamado así porque él pasaba su mano (iamsah) sobre el enfermo y éste sanaba con el permiso de Allah.’’

Y Dayyál  significa mentiroso."

 Él es llamado ‘Dayyál’  porque -como dijera Ibn Hayar- cubre la verdad con la falsedad.

Se dice (en árabe) ‘dayala al ba`ir bi al qutrán’  (se cubrió al camello con alquitrán) en referencia a la práctica deshonesta y engañosa de algunos comerciantes de la época pagana de cubrir los defectos o heridas del camello con alquitrán para así engañar al posible comprador;

o se dice dayala al iná' bi adh dhahab (cubrió el recipiente con oro) es decir revistió el recipiente con oro. Ibn Duraid dijo:

‘‘Él es llamado Ad Dayyál porque cubre la verdad con mentiras.’’

También fue dicho que es porque viajará por toda la Tierra , o porque cubrirá la Tierra.

La situación de los musulmanes en el momento de la aparición del Dayyál

Antes de que el Dayyál surja, los musulmanes tendrán una posición de importancia y gran poder. Parece que su apa­rición tendrá como propósito acabar con ese poder. En esa época, habrá un tratado de paz entre los musulmanes y los romanos; ambos atacarán a un enemigo común y lo derrotarán, después de esto la guerra comenzará entre los musulmanes y los cristianos. En Sunan Abü Daúd se narra que Dbü Majbar dijo: Oí al Mensajero de Allah decir: 

“Vosotros haréis un tratado de paz con los romanos, y ambos atacaréis a un enemigo común. Vosotros seréis victoriosos y tomareis el botín, después volveréis en forma segura hasta que acampéis en Mary Dhi Talul. Entonces uno de los cristianos levantará la cruz y dirá: ‘La cruz ha logrado la victoria’ y uno de los musulmanes se enfadará y la romperá (a la cruz). En ese momento los romanos romperán el tratado y empezarán a prepararse para la gran batalla.”

Podemos ver en el Hadiz que tan poderosos serán los musulmanes en esa época. Ellos lucharán, serán victorio­sos, conseguirán botines y retornarán sin peligro. Pode­mos ver que tan fuerte será su adhesión a la religión, pues cuando el cruzado levante la cruz y alegue que la victoria que los musulmanes ayudaron a lograr fue una victoria para la cruz, un musulmán será movido por su celo religioso a levantarse y romper la cruz. El grupo de musulmanes en ese lugar correrá a tomar sus armas y luchará contra los romanos, a pesar del hecho que ellos serán inferiores en número en ese lugar. El Mensajero testificó que ellos serán mártires y que Allah habrá de honrarlos con la Shahádah.  Esta traición de los romanos, y los eventos subsecuentes, serán la causa de esa gran batalla.

La gran batalla será entre los musulmanes y los cruzados.  La causa de esta batalla será la razón referida en el Hadiz citado anteriormente. Más de un Hadiz describe estabatalla y sus horrores, y cómo los musulmanes serán pacientes durante la misma, y lograrán la victoria sobre sus enemigos. Debe notarse que entre las líneas musulmanas habrá multitudes de cristianos que habrán abrazado el Islam. En Sahih Muslim se narra de Abú Hurairah que el Mensajero de Allah  dijo:

“ La Hora no vendrá hasta que los romanos acampen en Al A`máq o en Dábiq. Un ejército saldrá de Al Madinah para su en­cuentro, compuesto de las personas más buenas de la Tie­rra en esa época. Cuando se enfrenten entre sí, los roma­nos dirán: ‘Dejadnos enfrentar con aquellos a quienes vosotros tomasteis prisioneros (y se convirtieron al Islam) que los mataremos.’ Los musulmanes dirán: ‘No, por Allah, no nos haremos a un lado permitiéndoos combatir a nues­tros hermanos.’

Entonces lucharán. Un tercio [del ejerci­to musulmán] huirá, y Allah nunca aceptará su arrepenti­miento; un tercio será muerto, y ellos serán los mejores mártires ante Allah; y un tercio lograrán la victoria y nun­ca serán influenciados por la Fitnah. Luego conquistarán Constantinopla [1, y mientras éstos se encuentren repar­tiendo el botín, después de haber colgado sus espadas en los olivos, el Shaitán se dirigirá a ellos diciendo:

‘El Dayyál ha tomado vuestro lugar entre vuestras familias’

Enton­ces saldrán y se darán cuenta que esto no era verdad. Cuan­do lleguen a Siria, el Dayyál surgirá, y mientras ellos se están preparando para luchar, o están formando las filas, el tiempo para la oración vendrá. Ísa Ibn Mariam descen­derá y los dirigirá en la oración. Cuando el enemigo de Allah [el Dayyál] lo vea [a Ísa] se disolverá como la sal en el agua. Si Ísa lo dejara se disolvería completamente, pero Allah lo matará a manos [de Ísa], y él les mostrará la sangre en su lanza.”

El Mensajero describió los horrores de esa batalla en otro Hadiz, donde habló del coraje de los musulmanes. Los grupos de [combatientes] musulmanes combatirán uno tras otro hasta la victoria o la muerte durante tres días consecutivos. Parece que el número de musulmanes en esos días será reducido, basándonos en el hecho que los musulmanes ganarán la batalla con la ayuda de los refuer­zos del resto de los musulmanes que lleguen posteriormente. En Sahih Muslim se narra que Abdullah Ibn Masúd dijo:

“ La Hora no empezará hasta que la herencia ya no sea repartida y no haya alegría en los despojos de guerra”.

Entonces gesticuló con su mano (apuntando hacia Siria) y dijo: 

“Los Enemigos se reunirán contra la gente del Islam, y la gente del Islam se reunirá contra ellos.” Yo [el narrador] pregunté: ‘¿Te refieres a los romanos?’ Él dijo: “Sí”.

En ese momento habrá una lucha terrible y los musulmanes prepararán un destacamento que luchará hasta la muerte, de tal forma que éste no volverá a menos que sea con la victoria. Lucharán hasta que la noche los obligue a detenerse. Ambos lados volverán a sus campamentos y ninguno será victorioso; el destacamento musulmán será eliminado completamente. Los musulmanes prepararán otro destacamento que luchará hasta la muerte, y que no volverá a menos que sea con la victoria. Ellos lucharán hasta que la noche llegue. Ambos lados volverán a sus campamentos y ninguno será victorioso; el destacamento musulmán será eliminado por completo. Los musulmanes prepararán un tercer destacamento que luchará hasta la muerte, y que no volverá a menos que sea con la victoria. Lucharán hasta la tarde.

Ambos lados volverán a sus campamentos y ninguno será victorioso; el destacamento musulmán será eliminado por completo. En el cuarto día, el remanente de los musulmanes atacará, y Allah causará al enemigo la derrota. La lucha será de una violencia nun­ca antes vista, a tal punto que si un pájaro fuera a pasar por sus flancos, no alcanzaría el otro extremo antes de caer muerto. De cada cien combatientes sólo uno sobre­vivirá. Así pues ¿qué alegría habrá en los despojos de gue­rra, y en las herencias a ser divididas? Aún estando en este estado, ellos oirán hablar de una calamidad mayor. Un lamento los alcanzará:

¡El Dayyál ha tomado vuestro lugar entre vuestra descendencia!

Entonces ellos arroja­ran cualquier cosa que esté en sus manos y se pondrán en camino, enviando a diez jinetes por delante para que ex­ploren. El Mensajero de Allah  dijo:

“Por cierto que yo sé sus nombres, y los nombres de sus padres, y el color de sus caballos. Ellos serán los jinetes más expertos sobre la faz de la Tierra en aquel día, o [estarán] entre los jinetes más expertos sobre la faz de la Tierra en aquel día.”

Más detalles sobre la conquista de Constantinopla, la cual se menciona en el Hadiz sobre la gran batalla que noso­tros citamos anteriormente, serán encontrados en el Hadiz narrado por Muslim, también de Abú Hurairah que el Profeta  dijo:

“¿Habéis oído hablar de una ciudad, parte de la cual está en la Tierra y la otra (parte) está en el mar?”[Ellos dijeron: ‘Sí ¡Oh Mensajero de Allah!’ Él dijo:
“ La Hora no vendrá hasta que setenta mil de los hijos de Isaac la ataquen. Cuando ellos lleguen acamparán allí, y no lucharán con armas ni arrojarán flechas. Dirán: ‘Lá iláhailla Allah ua Alláhu Akbar’, y una de sus dos partes caerá.”

Zaur dijo [en otra transmisión del Hadiz]:

‘La parte que está en el mar (caerá)’. [El Profeta  dijo:] Entonces ellos dirán por segunda vez: ‘Lá iláha illa Allah ua Allahu Akbar’, y la otra parte caerá. Entonces ellos dirán por ter­cera vez: ‘Lá iláha illa Allab ua Allahu Akbar’, y los por­tones les serán abiertos. Entrarán en ella y tomarán el botín, y mientras ellos estén dividiendo los despojos de guerra, oirán el grito llamándolos: ¡El Dayyál ha apareci­do! e inmediatamente dejarán todo y emprenderán el regreso [a Al Madinah]”

La sequía y la hambruna que precederán la aparición del Dayyál

Las personas serán sujetas a una prueba severa antes de la aparición del Dayyál.

El cielo retendrá su lluvia y la tierra retendrá su vegetación.

En Sunan Ibn Máyah, Sahih Ibn Juzaimah y Mustadrak Al Hákim  fue narrado de Abu Umámah que el Mensajero de Allah  dijo:

“Antes de la aparición del Dayyál habrá tres años difíciles en los que las personas sufrirán intensamente el hambre. En el pri­mer año, Allah ordenará al cielo retener un tercio de su lluvia, y a la tierra retener un tercio de su vegetación. En el segundo año, ordenará al cielo retener dos tercios de su lluvia, y a la tierra dos tercios de su vegetación. En el tercer año ordenará al cielo retener toda su lluvia, y ni una gota caerá, y a la tierra retener toda su vegetación. Así que ninguna planta crecerá y ningún animal con pesuñas sobrevivirá; todos morirán excepto aquellos a quienes Allah salve”.

Alguien preguntó:

 ¿Y que manten­drá a las personas vivas en ese tiempo?

Él respondió:

“El Tahlil (decir Lá iláha illa Allah), el Takbir (decir Allahu Akbar) y el Tabmid (decir Al Hamdu Lilláh). Esto tomará el lugar del alimento para ellos.”

Los atributos y características del Dajjál

El Dajjál  alegará la divinidad, y hará cosas extraordina­rias para propagar su falsedad. Un hombre vendrá a él pensando que no será engañado y que su falsedad no ten­drá, efecto en él, pero cuando vea sus actos extraordina­rios lo seguirá. En Sunan Abu Daúd se narra con un Isnád Sahih de ‘Imrán Ibn Husain que el Mensajero de Allah(sala allaho alayhi wa salam) dijo:

“Quien oiga hablar del Dayyál, que se mantenga lejos de él, pues por Allah que un hombre vendrá a él considerándose creyente y acabará siguiéndolo, debido a las dudas que él suscita.”

Quien examina el tema del Dayyál con detenimiento y precisión sabrá con seguridad que es un impostor, desprovisto de cualquier atributo divino. No será más que un pobre ser humano incapaz, a pesar de los portentos que realizará. Come, bebe, duerme y realiza sus necesidades fisiológicas. ¿Cómo puede alguien así ser adorado, o siquiera pretender ser el señor del Universo cuando depende de cosas creadas?

Aunque esto es bastante obvio, el Mensajero (sala allaho alayhi wa salam) también nos dio mucha información sobre sus atributos y rasgos, para que los creyentes que vivan en el tiempo de su apari­ción lo reconozcan, y puedan confrontarlo sin ser engañados por su falsedad.
   
El Profeta (sala allaho alayhi wa salam) describió las características prominentes de su personalidad y su apariencia física. En Sahih Al Bujári se narra de Abdullah Ibn `Omar que el Mensajero de Allah (sala allaho alayhi wa salam) vio al Dayyál en un sueño y lo describió como “un hombre de buen porte, con un cutis rojizo, pelo rizado y tuerto; su ojo es como una uva flotante... La persona que más se le parece es Ibn Qatan de (la tribu de) Juzá’ah.”

En Musnad Ahmad y Sunan Abu Daud se narra con un Isnád Sahih de ‘Ubádah Ibn As Sámit que el Mensajero de Allah (sala allaho alayhi wa salam)  dijo:

“Os he dicho tanto sobre el Dayyál que temo que os confundáis. El Dayyál es un hombre de baja estatura, los dedos de sus pies están torcidos, su cabello es rizado, es tuerto, con un ojo blanquecino (con alguna nubosidad interna), ni prominente ni hundido. Así, si os confundís, sabed que vuestro Señor no es tuerto, y que vosotros no veréis a vuestro Señor [en este mundo].” 

En Sabih Ibn Hibbán y Musnad Ahmad se narra de Ibn Abbás que el Mensajero de Allah (sala allaho alayhi wa salam) dijo:

“El Dayyál es tuerto, blanco, con un cutis rojizo, es muy parecido a ‘Abd Al ‘Uzza Ibn Qatan. Y a pesar que muchas personas se condenarán por su causa, sabed que vuestro Señor no es tuerto.” 

El Mensajero (sala allaho alayhi wa salam)  hizo énfasis en describir los ojos del Dayyál, porque por más rasgos que el Dayyál pueda cambiar nunca podrá librarse de sus ojos. Los ojos son prominentes y obvios, y todos podemos verlos; sus rasgos no pueden ocultarse. Los Ahadiz citados anteriormente indican al­gunos defectos en sus ojos, el más claro es que será tuer­to. En algunos Ahadiz se declara que el ojo ciego será el derecho; en otros Ahadiz se dice que el ojo izquierdo será el ciego. Lo más probable es que será el ojo derecho, por­que los Ahadiz que afirman eso son Muttafaq ‘alaihi (na­rrados por Al Bujári y Muslim). El Mensajero (sala allaho alayhi wa salam) asemejó ese ojo a una uva flotante. Según otro Hadiz, describió al ojo derecho como ciego y sobresaliente.

En Sahih Al Bujári se narra de Abdullah Ibn 'Omar que el Profeta (sala allaho alayhi wa salam) dijo sobre el Dayyál:

“Su ojo derecho es ciego, [y éste es] como una uva flotante."

Según el Hadiz de Abú Sa`id narrado por Ahmad:

"Su ojo derecho es ciego y sobresaliente, no puede ocultarse. . .y su ojo izquierdo es como una estrella brillante.” 

Es decir que será es blanquecino, como fuera declarado anteriormente. En Sahih Muslim dice:

“El Dayyál tiene un ojo blanquecino.” 

An Nauaui interpretó estos informes de forma diferente. Indicó que todos los informes que describen a ambos ojos como defectivos son Sahih. La palabra árabe 'auar (tradu­cido en muchos casos como ‘tuerto’) significa ‘falto’ o ‘defectuoso’, y los dos ojos del Dayyál serán defectuosos. Fue narrado que el ojo defectivo será el ojo derecho, y fue narrado que el ojo defectivo será el ojo izquierdo. Fue narrado que uno de ellos será Táfi'ah (opaco), es decir que no habrá brillo en él; y fue narrado que el otro estará ‘flotando’, es decir sobresalido. Así, según la interpreta­ción de An Nauaui, uno de sus ojos no verá nada, y el otro verá pero será defectuoso. En uno de los informes (Hadiz) narrados por Muslim menciona que el ojo que no ve estará cubierto por un pliegue espeso de piel:

“El Dayyál tendrá un ojo desgastado, con una gruesa membrana de piel encima de él”.
Esta gruesa membrana de piel le impedirá ver.

El Mensajero (sala allahu alayhi wa salam)  describió el ojo con el que podrá ver. Dijo:

“El ojo del Dayyál es verde como vidrio”.
Esto fue narrado por Ahmad y Abú Na`im con un Isnád Sahih.
   
Hay una señal por la que Allah hará que el creyente reconozca al Dayyál, a diferencia de aquellos a quienes Allah  hará que no puedan reconocerla. Esta señal es algo escrito entre sus ojos:

“Ká Fá Rá” o “Káfir”.

En Sahih Al Bujári se narra de Anas que el Profeta (sala allaho alayhi wa salam) dijo:

“No hay Profeta enviado que no haya advertido a su nación sobre el tuerto mentiroso. Por cierto que él es tuerto, y vuestro Señor no lo es, y entre sus ojos está escrita la palabra Káfir."

En Sahih Muslim hay un Hadiz, similar al narrado por Al Bujari; pero menciona:

“Entre sus ojos está escrita la palabra Ká Fá Rá”

En Sahih Ibn Juzaimah, Sunan Ibn Máyah y Mustadrak Al Hákim se narra con un Isnád Sahih de Abú Umámah :

“Está escrito entre sus ojos Káfir. Cada creyente lo leerá, sin importar si sabe leer o es analfabeto.”

En Sahih Muslim dice:

“Entre sus ojos esta escrito Káfir, y todo quien odia lo que él hace lo leerá, o cada creyente lo leerá.”

La opinión de los eruditos -como An Nauaui, que Allah tenga misericordia de él- es que esta escritura es física y real. Es una escritura real que Allah dispondrá como señal definitiva de su incredulidad, mentira y falsedad. Allah la hará visible a todo musulmán, instruido o analfabeto. No hay razón para considerar esto imposible. Al Qádi mencionó que había cierta disputa entre los sabios al respecto. Algunos de ellos afirmaron que la escritura es real como hemos mencionado, mientras que otros afirmaron que se trata de una metáfora, y que en realidad se refiere a algún rasgo físico que aparecerá en él, basados en el hecho que el Profeta (sala allaho alayhi wa salam)  dijo que esta será leída por todo creyente, instruido o analfabeto. Pero ésta es una opinión débil.
   
El Mensajero (sala allaho alayhi wa salam)  nos dijo que el Dayyál será

“estéril; nin­gún niño le nacerá”.

Esto fue narrado por Muslim.


Su falsa pretensión de ser el señor del Universo

Si éstos son los atributos del Dayyál, atributos en los quehay muchas limitaciones,

¿entonces cómo puede esta cria­tura débil pretender ser el señor del Universo?

Él alegaráser el señor de los hombres, pero el verdadero Señor de la Humanidad no será visto en este mundo.

El Profeta (sala allahu alayhi wa salam) dijo:

“Sabed que nadie entre vosotros verá a su Señor hasta que muera”.

Es más, el Dayy,ál será una persona con defor­midades obvias, incluyendo ser tuerto.  

Otro de sus defectos mencionados por el Profeta (sala allahu alayhi wa salam) es que será Afhay, y el Afhay es aquel cuyas pantorrillas o muslos se encuentran exageradamente separados o cuyas piernas son algo corvas, lo cual motivará que camine de una forma extraña parecida a la del pato.

bn Al Arabi tenía razón cuando dijo:

‘Por los varios de­fectos del Dayyál es más que evidente que él ni siquiera puede librarse de ellos.’

Es decir que si él fuera lo que pretende ser, podría quitar los defectos y limitaciones de su cuerpo.

El hecho concreto es que es incapaz de hacer esto, lo que indica que él está subyugado al Señor del Universo.

El Profeta (sala allahu alayhi wa salam) recalcó el hecho de que elDayyáles tuerto

“...porque ésta es una señal visible que reconoce el erudito y el hombre ordinario, y hasta aquellos que no tienen la capacidad de entender los argumentos racionales”.

Pero aquellos que saben podrán reconocerlo y verlo como lo que él realmente es.

Los recursos que ayudan al Dayyál a suscitar la Fitnah (tribulación)


El Dayyál alegará la divinidad, y le será dada la habilidad de realizar hechos asombrosos que serán una gran Fitnah para las personas. Éstos hechos incluirán:

La habilidad de viajar rápidamente por la Tierra

Según el Hadiz de An Nauuaz Ibn Sam`án en Sahih Muslim, el Profeta (sala allhu alayhi wa salam) fue preguntado acerca de la velocidad de movimiento del Dayyál por la Tierra , y dijo: “Será como las nubes manejadas por el viento…” 
El Mensajero (sala allhu alayhi wa salam)  advirtió que viajará por toda la Tierra y no dejará ninguna ciudad sin entrar en ella, salvo Makkah y Al Madinah. Según el Hadiz de Anas narrado en los Sahihain: “No hay ciudad en la que el Dayyál no entrará, salvo Makkah y Al Madinah.”

 Según el Hadiz de Abú Umámah narrado por Ibn Máyah, Ibn Juzaimah y Al Hákim: “No habrá lugar de la Tierra en el que él no entre y tome el control, salvo Makkah y Al Madinah. Él no se acercará a alguna de sus entradas sin que sea confrontado por Ángeles con espadas en sus manos.”
  
 Su Paraíso y su Infierno

Una de las cosas con que el Dayyál confundirá a las personas será el hecho de que él tendrá algo parecido al Paraíso y al Infierno, o parecido a un río de agua y un río de fuego. Estas cosas no serán lo que parecen, pues lo que las personas crean que es fuego será agua fresca, y lo que piensen que es agua fresca será fuego.

En Sahih Muslim se narra de Hudhaifah que el Mensajero de Allah (sala allhu alayhi wa salam) dijo: “Él (es decir el Dayyál) tendrá un Paraíso y un Infierno, pero su Infierno será un Paraíso y su Paraíso será un Infierno.” 

En Sahih Al Bujári y Sahih Muslim es narrado también de Hudhaifah que el Profeta  (sala allhu alayhi wa salam) dijo acerca del Dayyá1. “Él tendrá agua y fuego, pero su fuego será agua fresca y su agua será fuego”. El informe narrado por Muslim agrega: “Así que no os expongáis a perecer.”

Según un informe narrado por Muslim Hudhaifah narró que el Mensajero de Allah  (sala allhu alayhi wa salam) dijo: “Yo soy el más conocedor de lo que tendrá el Dayyál. Tendrá dos ríos, uno que parecerá ser de agua fresca, y otro que parecerá ser de un fuego voraz. Si alguno de vosotros es sometido a esta prueba que se dirija al que piensa que es de fuego, que cierre sus ojos, incline su cabeza y beba de él, pues es agua fresca.”

Según otro informe narrado en Sahih Muslim, también de Hudhaifah : “El Dayyál surgirá y con él habrá agua y fuego. Lo que las personas piensen es agua será fuego ardiente, y lo que las personas piensen es fuego será agua fresca, dulce. Quien de vosotros sea puesto a prueba, que salte en aquello que piensa es fuego, pues (en realidad) es agua buena y dulce.” 

Se hace evidente de los textos mencionados que las personas no sabrán la naturaleza real de lo que el Dayyál tiene con él. Lo que ellas ven no será real, de hecho será lo opuesto de lo que parece ser. Así, en algunos de los Ahádiz narrados en Sahih Muslim dice: “Él traerá con él algo similar a un Paraíso y un Infierno; aquel que él (el Dayyál) dice es el Paraíso será de hecho el Infierno.” 

 Buscará la ayuda de los Shaiátin (los demonios)

Indudablemente el Dayyál buscará la ayuda de los Shaiátin. Es conocido que los Shaiátin no sirven a nadie excepto a aquel que es el más falso y descaminado, y a quien es siervo de otro que no es Allah. En Sunan Ibn Máyah, Sahih Ibn Juzaimah y Mustadrak Al Hákim se narra con un Isnád Sahih de Abu Umámah que el Mensajero de Allah (sala allhu alayhi wa salam) dijo: “Parte de su Fitnah será que él le dirá a un beduino: ‘Si resucito a tu padre y madre, testificarás que yo soy tu señor?’ Él dirá: ‘Sí.’ Entonces un Shaitán se le aparecerá en la forma de su padre y su madre, y le dirán: ‘Hijo mío, síguelo, pues él es tu señor’.

Los objetos inanimados y los animales responderán a sus órdenes

Entre las Fitan con que Allah probará a Sus siervos está que el Dayyál ordenará al cielo que descienda la lluvia, y así lo hará; y ordenará a la tierra que produzca frutos, y así lo hará. Llamará a los animales y ellos lo seguirán. Ordenará a las ruinas que saquen sus tesoros enterrados y ellas responderán. En Sahih Muslim se narra de An Nauuás Ibn Sam`án que el Profeta (sala allhu alayhi wa salam) dijo: “Él vendrá a las per­sonas, exhortándolas a seguirlo y ellas creerán en él y le obedecerán. Ordenará al cielo que descienda la lluvia, y así lo hará; ordenará a la tierra que produzca frutos, y así lo hará. Después se dirigirá a donde otro grupo de perso­nas y los exhortará a seguirlo, pero ellos lo rechazarán. Entonces los dejará y sufrirán una sequía, y no quedará nada de sus riquezas. Pasará por las tierras áridas y dirá: ¡Extraed vuestros tesoros! Y los tesoros lo seguirán como un enjambre de abejas.” 

Matará a un joven y después lo resucitará

Otra de sus tribulaciones será que matará a un joven creyente -o por lo menos así le parecerá a las personas- y entonces alegará que él lo resucitará. En Sahih Al Bujári se narra que Abú Sa`id dijo: El Mensajero de Allah (sala allhu alayhi wa salam) nos habló detalladamente sobre el Dayyál. Una de las cosas que nos dijo fue: “El Dayyál vendrá y le será prohibido entrar por las puertas de Al Madinah. Así que acampará en una zona estéril cerca de ella. Ese día un hombre saldrá (de Al Madinah) para encontrarse con él, alguien que es lo mejor de la humanidad o alguien que es de lo mejor de la humanidad, y dirá: ‘Doy testimonio que tú eres el Dayyál, de quien el Mensajero de Allah (sala allhu alayhi wa salam) nos advirtió’. El Dayyál dirá: ‘Si yo mato a este hombre y después le resucito, te quedará alguna duda acerca de este asunto (es decir, su pretensión de ser el señor de los hombres)’. Él dirá: ‘No.’ Así pues, lo matará y después lo resucitará. Entonces el hombre dirá: ‘Por Allah, que nunca he estado más seguro acerca de ti de lo que estoy ahora’. El Dayyál querrá matarlo pero no podrá hacerlo.”

Muslim también narró esto de Abú Said Al Judri con la redacción: “El Dayyál aparecerá, y un hombre de entre los creyentes partirá para confrontarlo. É1 será intercep­tado por los guardias del Dayyál que le preguntarán: ‘¿Dónde vas?’ Él dirá: ‘Voy donde este hombre que ha aparecido’. Ellos le dirán: ‘¿Acaso no crees en nuestro señor [refiriéndose al Dayyál]?’ E1 dirá: ‘Nosotros conocemos a nuestro Señor [Allah] muy bien’. Ellos dirán: ‘¡Matadlo!’ Entonces uno de ellos dirá a los otros: ‘¿Acaso el Dayyál no nos prohibió que matáramos a alguien sin consultarle?’ Así que ellos lo llevarán donde el Dayyál, y cuando el creyente lo vea dirá: ‘¡Oh, gente! Éste es el Dayyál de quien el Mensajero de Allah (sala allhu alayhi wa salam)  habló’. El Dayyál dará órdenes de que sea echado de estómago, después dirá: ‘¡Tomadlo y golpeadlo!’ Será golpeado severamente, y entonces el Dayyál dirá: ‘¿Ahora crees en mí?’ El creyente dirá: ‘Tú eres el Masíh Ad Dayyál (el Falso Mesías).’ Entonces el Dayyál ordenará que sea cortado con una sierra desde su cabeza hasta su pelvis, y luego caminará entre los dos pedazos, y dirá: ‘¡Levantaos!’ y ellos se pondrán de pie. Entonces le dirá: ‘¿Ahora crees en mí (es decir, que soy tu señor)?’ El creyente dirá: ‘Estoy bien seguro de quien eres’. Dirá: ‘¡Oh gente! Él no podrá matar a nadie después de mí’. El Dayyál lo tomará para degollarlo, pero (un escudo de) cobre se pondrá entre su cuello y clavícula, y él no podrá hacerle nada. Lo tomará por sus manos y piernas y lo lanzará al rió de fuego, y las personas pensarán que él lo ha arrojado al Infierno, pero el realidad habrá sido arrojado al Paraíso.” El Mensajero de Allah (sala allhu alayhi wa salam) añadió: “Él será el más grande mártir ante el Señor del Universo.

Dónde aparecerá el Dayyál?

El Dayyál surgirá en el Este de la tierra de los Persas que se llama Jurásán. Según el Hadiz narrado por At Tirmidhi, Ibn Máyah, Al Hákim, Ahmad y Ad Diá’ en Al Mujtárah, Abu Bakr As Siddiq   narró que el Mensajero de Allah (sala allahu alayhi wa salam) dijo:

“El Dayyál surgirá de una tierra en el Este, llamada Jurásán, y sus seguidores serán las personas con caras como los escudos planos.”  
Pero su verdadera identidad será evidente para los musulmanes cuando llegue a un lugar entre Irak y Siria. Según un Hadiz en Sahih Muslim, de An Nauuás Ibn Sam`án  que el Profeta (sala allhu alayhi wa salam) dijo:

“El surgirá entre Siria e Irak, y difundirá la perdición por todas partes. ¡Oh siervos de Allah! Manteneos firmes.

El tiempo de su permanencia en la Tierra

Los Sahaba le preguntaron al Profeta (sala allhu alayhi wa salam) cuánto tiempo el Dayyál permanecería en la Tierra.

Dijeron :

‘¿Cuánto será el tiempo de su estancia en la Tierra ?’ Respondió: “Cuarenta días, uno (de los cuales) será como un año, otro como un mes, otro como una semana y el resto de sus días (serán) como vuestros días.” Esto fue narrado por Muslim y Abu Daúd,  de An Nauuás Ibn Sam`án
(radeya Allahu anhum)

Los seguidores del Dayyál
El Dayyál, el falso Mesías, el mentiroso tuerto, es el mismo rey que los judíos están esperando para poder gobernar elmundo definitivamente. En el libro Musnad Abmad se narra de ‘Uzmán Ibn Abí Al Às que el Mensajero (sala Allahu alyhi wa salam) dijo: “La mayoría de los seguidores del Dayyál serán los judíos y las mujeres”. Según el Hadiz de Anas Ibn Málik narrado por Muslim, el Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam) dijo: “El Dayyál será seguido por setenta mil judíos de Asbahán, vistiendo capas.” 
  
Abu Na`im mencionó la existencia de un barrio de Asbahán habitado sólo por judíos, y éste aun permanece.
El nombre por el que el Dayyál es conocido entre los ju­díos es Al Maíz Ibn Daud (el Mesías hijo de David). Ellos alegan que él surgirá al final de los tiempos y que su do­minio se extenderá sobre la tierra y el mar, y que los ríos fluirán con él. Ellos alegan que él es uno de los portentos de Allah y que restaurará el dominio a los judíos. Sus alegatos son falsos y él será el Mesías de la desviación, pues el Mesías de la guía es Jesús hijo de María (Ísa Ibn Mariam). Él es quien matará al Dayyál, el falso Mesías y a sus seguidores.


AL Madinah y Makkah estarán protegidas contra el Dayyál
El Dayyál se dirigirá hacia Al Madinah, pero no podrá entrar en ella porque Allah ha protegido a Makkah y Al Madinah de él y de la plaga, y ha designado a Sus Ángeles para que las protejan. En Sahih Al Bujári es narrado de Abú Hurairah que el Profeta (sala Allahu alayhi wa salam)  dijo: “En los pasos montañeses de Al Madinah hay Ángeles. La plaga y el Dayyál no entrarán en ella”.
 Al Bujári también narró de Anas que el Profeta (sala Allahu alayhi wa salam)   dijo: “El terror del Dayyál no entrará en Al Madinah. En ese día (Al Madinah) tendrá siete puertas, encima de cada una de ellas habrá dos Ángeles.” 
En Sunan At Tirmidhi y Musnad Ahmad se narra de Abú Hurairah que: “El Dayyál vendrá del Este, dirigiéndose a Al Madinah, hasta que cuando llegue detrás de Uhud, será interceptado por los Ángeles. Ellos golpearán su rostro y lo devolverán hacia Siria, y allí será destruido, allí será destruido”. At Tirmidhi dijo: Es un Hadiz Sahih.
En Sahih Al Buján y Sahih Muslim es narrado de Anas que el Mensajero de Allah  (sala Allahu alayhi wa salam)  dijo: “No hay ciudad en la que el Dayyál no entrará, excepto Makkah y Al Madinah. No hay ningún paso de montaña hacia estas ciudades que no tenga Ángeles rodeándolo y cuidándolo. É1 acampará en una zona estéril, y Al Madinah y sus habitantes serán agitados por tres terremotos, entonces cada Káfir e hipócrita en la ciudad saldrá para unírsele.”
En Sunan Ibn Máyab, Sahih Ibn Juzaimah y Mustadrak Al Hákim se narra de Abu Umámah que el Profeta (sala Allahu alayhi wa salam)    dijo: “No habrá lugar en la Tierra en el que no entre el Dayyál y prevalezca, excepto Makkah y Al Madinah. No se aproximará a alguno de sus pasos de montaña sin que sea interceptado por los Ángeles con las espadas desenfundadas, entonces acampará en Ad Daríb Al Ahmar, al borde de la tierra estéril. Entonces Al Madinah y sus habitantes serán agitados por tres terremotos, y no que­dará ningún hipócrita en ella, sea hombre o mujer, sin que salga para unírsele. El mal será eliminado de Al Madinah como la escoria es eliminada del hierro fundido. Ese día será llamado Al Jalás (la purificación)”. Fue preguntado: ‘'¿Dónde estarán los árabes en ese día?’ Él respondió: “En ese día ellos serán pocos.”

¿Cómo salvarse del Dayyál?
Hemos expresado anteriormente que poco antes de que el Dayyál aparezca, los musulmanes serán muy fuertes y lucharán grandes guerras de las que saldrán victoriosos. El Dayyál vendrá a acabar con el poder de los musulmanes, que habrán derrotado al más grande estado de ese tiempo que serán los romanos. Los musulmanes habrán reconquis­tado Constantinopla. Shaitán les gritará que el Dayyál ha tomado sus familias, entonces ellos abandonarán el botín y retornarán a sus casas. Entonces el Dayyál surgirá, y los musulmanes se prepararán para la guerra. Así cuando Jesús (Ísa) descienda, encontrará a los musulmanes “...preparándose para la lucha, y formando las líneas...”  Indudablemente cada musulmán en ese momento se unirá a las fuerzas musulmanas que estarán llevando el estandarte del Yihád por la causa de Allah y resistirá en nombre de la verdad, no importa cuan severa sea la prueba. Esto es lo que nuestro Mensajero (sala Allahu alayhi wa salam)  nos ha aconsejado que hagamos. Él nos informó sobre la aparición del Dayyál y dijo  (sala Allahu alayhi wa salam) : “Él surgirá entre Siria e Irak, y difundirá el mal en todas las direcciones. ¡Oh siervos de Allah! Manteneos firmes.” 
  
No es permisible para un musulmán acercarse al Dayyál aun cuando se sienta seguro de sí mismo, porque este traerá consigo argumentos engañosos que harán temblar la fe de la persona. En Sunan Abú Daud se narra con un Isnád Sahih de 'Imrán Ibn Husain que el Mensajero de Allah   (sala Allahu alayhi wa salam) dijo: “Quien oiga hablar del Dayyál, que se mantenga lejos de él. Pues, por Allah que un hombre irá a él considerándose un creyente, y después acabará siguiéndolo debido a los argumentos engañosos que produce.”
  
No hay nada malo en que aquellos que no puedan resistir al Dayyál huyan de él. Esto es lo que muchas personas harán en ese momento. En Sahih Muslim se narra que Umm Shuraik dijo: Oí al Profeta  (sala Allahu alayhi wa salam)  decir: “Las personas hui­rán del Dayyál hacia las montañas.”
Si el creyente se ve forzado a confrontarlo entonces tiene que tomar la responsabilidad y defender la verdad, presentando buenos argumentos. El Profeta  (sala Allahu alayhi wa salam)  dijo: “Si él aparece mientras me encuentro entre vosotros, entonces yo me encargaré de él por vosotros. Pero si surge cuando ya no esté, cada uno tendrá que defenderse por sí mismo, y Allah cuidará de cada musulmán por mí.” El Mensajero de Allah  (sala Allahu alayhi wa salam) nos dejó el conocimiento para darnos una visión clara sobre el Dayyál: “Él tendrá un cuerpo físico y comerá y beberá, mientras que Allah no será visto en este mundo, y Él no tiene necesidad alguna del alimento y la bebida.” El Dayyál tendrá ojos defectuosos, como dice en el Hadiz: “Él será un hombre joven con pelo rizado, y un ojo ciego. Él es muy parecido a Abd Al `Uzza Ibn Qatan.”
El Profeta  (sala Allahu alayhi wa salam) ordenó a aquellos que lo encuentren recitar los primeros versículos de Surah Al Kahf: “Quien de vosotros se lo encuentre, que le recite los primeros versículos de Surah Al Kahf”Según el Hadiz de Abu Umámah : “Parte de su tribulación será que tendrá con­sigo un Paraíso y un Infierno. Su Infierno será el Paraíso y su Paraíso será el Infierno. Quien sea puesto a prueba con su fuego, que busque la ayuda de Allah y recite los primeros versículos Surah Al Kahf..”
En distintos Ahadiz auténticos se menciona: “Quien memoriza diez versículos de Surah Al Kahf será protegido de la tribulación del Dayyál”. Algunos informes mencionan los primeros diez versículos de Surah Al Kahf y algunos mencionan los últimos diez versículos.
Puede que alguien se pregunte: ¿Por qué ofrecen los pri­meros diez o los últimos diez versículos de Surah Al Kahf protección contra el Dayyál. 
Algunos eruditos afirmaron que esto es debido a que al principio de esta Surah Allah describe cómo Él protegió a esos jóvenes del tirano perverso que quiso matarlos, así pues, es apropiado recitar estos versículos en una situación similar, para que uno pueda ser salvado al igual que ellos lo fueron.
También fue dicho que es porque en los primeros versículos se mencionan las maravillas y señales que for­talecerán el corazón del lector, de tal manera que no se verá tentado por el Dayyál, y no se deslumbrará por lo que él hace; esto no lo distraerá ni lo afectará.
Otra manera con la cual el musulmán podrá protegerse del Dayyál será huir a una de las dos Nobles Mezquitas, Makkah o Al Madinah,  ya que le ha sido prohibido al Dayyál entrar en ellas.
El Profeta  (sala Allahu alayhi wa salam) nos ha descrito cómo aquel hombre virtuoso confrontará el Dayyál, y cómo hablará con la verdad de manera severa. También hemos citado los Ahadiz que describen la verdadera naturaleza del Paraíso y el Infierno que el Dayyál tendrá con él.
Otra manera en que la persona puede salvarse del Dayyál es volverse a Allah y buscar Su protección de él y su Fitnah. Los Ahadiz le ordenan al musulmán que busque refugio en Allah de la Fitnah del Dayyál. En Sahih Al Bujári se narra que ‘Aisha dijo: ‘Oí al Mensajero de Allah   (sala Allahu alayhi wa salam) buscar refugio de la Fitnah del Dayyál durante su oración.’ 
El Mensajero  (sala Allahu alayhi wa salam)  siempre buscaba refugio en Allah de la Fitnah del Dayyál después de recitar el Tashahhud. Decía: “Allahumma inná na'údhu bika min `adháb yahannam, ua min 'adháb al qabri, ua min fitnah al mahiá ua al mamát, ua min fitnah al masih ad dayyál ¡Oh Allah! Ciertamente busco refugio en Ti del tormento del Infierno, del tormento de la tumba, de las tribulaciones de la vida y de la muerte, y de la tribulación del Dayyál.”


Su destrucción y el final de su tribulación, y la destrucción de sus seguidores
Hemos citado el Hadiz narrado por Muslim de Abu Hurairah (radeya Allahu anhu)al final del cual se declara que la destrucción del Dayyál será a manos de Jesús (Ísa Ibn Mariam )(alayhi a salam): “Mientras que ellos (el ejército musulmán) están preparándose para luchar, o están formando las filas, entonces la Iqámah (llamada al comienzo de la oración) de la oración será realizada. `Ísa Ibn Mariam descenderá y los dirigirá en la oración. Cuando el enemigo de Allah (el Dayyál) lo vea, se disolverá como la sal en el agua. Si Ísa lo dejara, él se disolvería completamente, pero Allah lo matará por manos de Ísa, y él les mostrará la sangre (del Dayyál) en su lanza.” 
  
En Sunan Ivn Máyah, Sahih Ibn Juzaimah y Mustadrak Al Hákim, se narra de Abú Umámah con un Isnád Sabih que el Profeta (sala Allahu alayhi wa salam) dijo:
“Su líder (es decir, el líder de los musulmanes que se están preparando para luchar contra el Dayyál) será un hombre virtuoso. Cuando él se haya adelantado para dirigirlos en la oración del Fayr, Ísa Ibn Mariam descenderá. El Ímám (quien dirige la oración) re­trocederá para que Ísa pueda adelantarse (y dirigirla). Ísa pondrá su mano en sus hombros y le dirá: ‘Ve adelante y dirige la oración, ya que la Iqámah fue realizada para que tú la dirijas’. Entonces el Imám los dirigirá en la oración, y cuando haya terminado Isa  (alayhi salam)dirá: ‘¡Abrid las puertas!’ Ellos las abrirán, y detrás de éstas estará el Dayyál, acompaña­do por setenta mil judíos, todos ellos empuñando espadas adornadas. Cuando el Dayyál lo vea, empezará a disolver­se como la sal en el agua, y escapará. Ísa (alayhi a salam) lo alcanzará en la puerta oriental de Ludd , y lo matará. Allah derrotará a los judíos, y no habrá creación de Allah detrás de la que los judíos se escondan sin que Allah la haga hablar (delatándolos), piedras, árboles, paredes y animales, salvo Al Garqad que es uno de sus árboles y no los delatará. Todo lo demás dirá: ‘¡Oh siervo creyente en Allah! He aquí un judío, ven y mátalo’.
Se narró de Abu Hurairah que el Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam)  dijo:
 “ La Hora no vendrá hasta que los musulmanes lu­chen contra los judíos, y los musulmanes los vencerán. Los judíos intentarán esconderse detrás de las rocas o ár­boles, y éstas hablaran diciendo: ‘¡Oh siervo creyente en Allah! He aquí un judío detrás de mí. Ven y mátalo’. Ex­cepto Al Gargad que es uno de los árboles de los ju­díos.”

La creencia de Ahlu Sunnah acerca del Dayyál
An Nauaui dijo en su comentario de Sabih Muslim: ‘AlQádi dijo: Estos Ahádiz que fueron citados por Muslim y otros acerca de la historia del Dayyál son pruebas en favor de la opinión de la gente de la verdad (es decir Ahlu Sunnah) de que la existencia (del Dayyál) es real.
Él es una persona por medio de quien Allah probará a Sus siervos, y a quien Él permitirá hacer cosas que sólo Allah puede hacer, como resucitar a las personas que él ha matado, hacer que el mundo prospere y que la tierra sea fecunda. Él tendrá un Paraíso y un Infierno, y dos ríos; tesoros de la tierra lo seguirán; él ordenará al cielo que haga descender la lluvia y lloverá, y ordenará a la tierra producir frutos y ésta lo hará. Todo eso pasará por la voluntad y decreto de Allah. Después de esto Allah lo incapacitará, de manera que no podrá matar a aquel hombre (que saldrá de Al Madinah) ni a nadie más; Allah pondrá un fin a su engaño. Ísa (alayhi a salam) lo matará, y Allah hará que los creyentes aguanten con firmeza.
Ésta es la opinión de Ahlu Sunnah, y de todos los MuhaddiZin [los sabios del Hadiz], Fuqahá' [los sabios de la Ley islámica] y comentaristas. Esto a diferencia de aquellos que negaron (la existencia) del Dayyál, como la secta Jauáriy, Yáhmiiah y  algunos de la secta Mu`tazilah. Y aquellos de la secta Yáhmiiah y otros que creyeron que la existencia del Dayyál es real, pero no así sus actos extraordinarios. Ellos alegan: ¿Si él es real, cómo es posible entonces que sea apoyado con milagros y actos extraordinarios como aquellos dados a los Profetas  (alayhum a salam)? Éste es un error, porque él no alegará ser un profeta, de tal manera que puedan considerarse los milagros que élhace como evidencia para apoyarlo. Sino que él alegará la divinidad, y esta pretensión se mostrará falsa por su misma condición. La evidencia de que él no es más que un ser creado será suficientemente clara; él será físicamente defectivo, e incapaz de quitar los defectos en sus ojos o la señal de su incredulidad escrita entre sus ojos. Por estas razones y otras, nadie será engañado por él excepto las personas fútiles, ya sea por su pobreza y necesidad, o porque temen la persecución, ya que su tribulación será muy grande y deslumbrará a las personas. Él viajará moviéndose tan rápidamente de lugar en lugar que no se quedará el tiempo suficiente en alguna parte como para que estas personas fútiles lo examinen y descubran sus limitaciones, por lo que la mayoría creerán en él.

Ibn Saiiád y el Dayyál
Ibn Saiiád era un judío de Al Madinah cuyo nombre era Sáf. Él se parecía al Dayyál en muchos aspectos, y el Mensajero (sala Allahu alayhi wa salam)  no estaba seguro acerca de él. El Profeta (sala Allahu alayhi wa salam)  trató en más de una ocasión averiguar lo que él realmente era, lo que indica que no recibió la revelación acerca de su verdadera naturaleza. Muslim narró de Abdullah Ibn 'Omar que 'Omar Ibn Al Jattáb salió con el Mensajero  de Allah (sala Allahu alayhi wa salam)  y un grupo (de los Sahabah) para ver a Ibn Saiiád, y lo encontraron jugando con algunos muchachos en la fortaleza de los Banu Mugálah. En esa época Ibn Saiiád se encontraba próximo a la pubertad. Él no notó nada hasta que el Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam)   le dio una palmada en la espalda. Entonces el Profeta(sala Allahu alayhi wa salam)  le dijo a Ibn Saiiád: “¿Das testimonio que yo soy el Mensajero de Allah?” Ibn Saiiád lo miró y dijo: ‘Doy testimonio de que eres el Mensajero de los iletrados’. Entonces Ibn Saiiád dijo: ‘¿Acaso tú das testimonio que yo soy el Mensajero de Allah?’ El Profeta lo negó y dijo: “Yo creo en Allah y Sus Mensajeros.”
Entonces el Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam)  le dijo: “¿Qué es lo que está pasando?” Ibn Saiiád dijo: ‘Uno verdadero y uno mentiroso vienen a mí’. El Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam)    le dijo: “Estás desconcertado.”
Luego dijo: “Te estoy escondiendo algo, ¿qué es?” Ibn Saiiád dijo: ‘Es un Duj....’ El Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam)  dijo: “¡Apártate de mí! Tú no puedes ser más de lo que eres”.El Profeta (sala Allahu alayhi wa salam)  había pensado la palabra Duján que significa humo, pero Ibn Saiiád sólo pudo adivinar una parte de la palabra y no su totalidad debido a la ayuda de un demonio, pero esto demostraba que él no era el Dayyál.
El Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam)  salió para verlo en otra ocasión, como fuera narrado por Muslim después del Hadiz citado anteriormente. Sálim Ibn Abdullah dijo: Oí a`Abdullah Ibn 'Omar decir: Después de esta vez el Mensajero de Allah  (sala Allahu alayhi wa salam)  fue con Ubai Ibn Ka`b Al Ansári a las palmas datileras donde Ibn Saiiád se encontraba. El Profeta (sala Allahu alayhi wa salam)  se escondió detrás de los troncos de las palmeras, esperando que Ibn Saiiád diga algo antes de que éste lo vea. Ibn Saiiád se encontraba en un colchón, envuelto en una capa y murmurando algo a sí mismo. La madre de Ibn Saiiád vio al Mensajero de Allah  (sala Allahu alayhi wa salam)  detrás del tronco de la palmera y le dijo a Ibn Saiiád: ‘¡Ibn Saüád! Muhammad está aquí’. Ibn Saiiád se levantó, y el Mensajero de Allah  dijo: “Si ella no nos hubiera delatado, la verdad se habría hecho evidente.”  
An Nauaui dijo en su comentario de Muslim: ‘Su historia es algo problemática y confusa. ¿Era él el infame Dayyál o no? Indudablemente él era uno de los Dayáyilah (mentirosos o impostores). Los eruditos dijeron que el significado claro de los Ahádiz es que el Profeta (sala Allahu alayhi wa salam)  no recibió ninguna revelación (Uahí) que afirmara o negara si él era el Dayyál o no. Lo que le fue revelado eran las características del Dayyál. En el caso de Ibn Saiiád había sólo evidencia circunstancial. Por eso el Profeta (sala Allahu alayhi wa salam)  no estaba seguro completamente si él era el Dayyál o no, y por esto le dijo a 'Umar:
“Si él realmente fuera el Dayyál, tú podrías matarlo.”`Omar Ibn Al Jattab estaba seguro que Ibn Saiiád era el Dayyál, como lo estaba `Abdullah Ibn 'Omar. Abú Daud narró con un Isnád auténtico que Ibn 'Omar solía decir: ‘Por Allah, yo no dudo que Ibn Saiiád es el Dayyál.’
An Nauaui citó Al Baihaqi diciendo: ‘El Hadiz de Yábir sólo indica que el Profeta(sala Allahu alayhi wa salam)  no dijo nada en respuesta a lo que 'Omar había dicho. Puede que él no estuviese seguro sobre Ibn Saiiád, después se le hizo claro que él no era el Dayyál, como se declara en el Hadiz de Tamim. Mencionaremos el Hadiz de Tamim más adelante.
Ibn Saiiád vivió durante algún tiempo después de la muerte del Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam)   y alegó haberse hecho musulmán, pero las personas no estaban seguras sobre su Islam y continuaron teniendo dudas sobre él. Ibn 'Omar -según los informes narrados por Muslim- se encontró con Ibn Saiiád dos veces, y en ambas ocasiones se comportó como si creyera que el realmente era el Dayyál.
Muslim también narró que Abú Sa’íd Al Judri dijo: Nosotros salimos (de Al Madinah) para realizar el Hayy o la 'Umrah, e Ibn Saiiád estaba con nosotros. Nos detuvimos para acampar, y las personas se esparcieron. Él y yo nos quedamos solos, y yo me sentía muy nervioso por su causa, debido a lo que estaba diciéndose sobre él. Él trajo su equipaje y lo puso con el mío. Yo le dije: ‘Hace mucho calor, ¿por qué no colocas tus cosas bajo ese árbol?’ y el así lo hizo. Luego nos fueron traídas algunas ovejas, y él fue y trajo un vaso de leche y dijo: ‘Bebe ¡Oh Abú Sa’íd!’ Yo dije: ‘Hace mucho calor, y la leche estará caliente’. La única razón por la que le dije eso era que yo no quería beber algo que él ofrecía [pues temía que fuere el Dayyál]. Él dijo: `Abu Sa’íd, estoy pensando en tomar una soga y amarrarla a un árbol para ahorcarme, debido a lo que las personas están diciendo sobre mí. ¡Oh Abu Sa’íd! ¿Quién conoce más acerca de los Ahadiz del Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam)  que vosotros los Ansár? ¿Acaso el Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam)    no dijo [acerca del Dayyál] que “él es un Káfír”, y yo soy musulmán? ¿Acaso no dijo el Mensajero de Allah  (sala Allahu alayhi wa salam)  que “él será estéril y no tendrá ningún hijo”, y yo he dejado a mis hijos en Al Madinah? ¿Acaso no dijo el Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam) que “él no entrará en Al Madinah o Makkah”, y yo he venido de Al Madinah y estoy dirigiéndome hacia Makkah?”
Pero esta evidencia citada por Ibn Saiiád perdió su importancia, por lo menos en lo que respecta a Abu Sa’id Al Judri, porque Ibn Saiiád agregó: ‘Pero, por Allah, yo sé donde él [el Dayyál] está ahora, y yo conozco a su padre y a su madre’. Y alguien le preguntó: ¿No te gustaría ser aquel hombre [o sea el Dayyál]? Y él respondió: ‘Si me fuera ofrecido no lo rechazaría.

El Dayyál según el Hadiz de Tamim Ad Dari
Muslim narró de Fátimah Bint Qais, la hermana de Ad Dahhák Ibn Qais, que ella oyó al portavoz del Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam) exclamar: ‘As Saláh Yámi`ah [Venid a la oración en congregación]’ por lo que ella se dirigió hacia la mezquita. Ella dijo: ‘Oré con el Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam), y yo estaba en la fila de las mujeres que estaba directamente detrás de los hombres. Cuando el Mensajero de Allah (sala Allahu alayhi wa salam)   hubo completado la oración, se sentó en el Minbar sonriente y dijo:
“Que cada persona se quede donde está. ¿Sabéis por qué os he reunido?” Ellos dijeron: ‘Allah y Su Mensajero saben mejor.’ Él dijo: “Os he reunido porque Tamim Ad Dári, quien era cristiano, ha venido aquí, y me ha jurado obediencia y se ha vuelto musulmán. Él me ha contado algo parecido a lo que os he dicho acerca del Dayyál. Me dijo que él se encontraba viajando en un barco, con treinta hombres de (las tribus de) Lajm y Yudhám, y fueron azotados por las olas del mar durante un mes, finalmente encontraron refugio en una isla al momento del ocaso. Después se dirigieron a la isla en botes y desembarcaron en ella. Allí fueron interceptados por una bestia cuyo pelo era tan espeso que no pudieron diferenciar su cara de su parte de atrás, debido a la cantidad de pelo. Entonces exclamaron: La perdición sea sobre ti, ¿quién eres? Y ella respondió: Yo soy Al Yassásah. Ellos dijeron: ¿Qué es Al Yassásah? Y ella dijo: ¡Oh, gente! Buscad a este hombre en el templo, pues él está ávido de las noticias que le proveáis. Temimos que esta bestia sea un demonio. Así que nos dirigimos deprisa al templo donde encontramos al hombre más grande que hayamos visto alguna vez, retenido con trabas, con sus manos atadas a su cuello y con grilletes de hierro desde sus piernas hasta sus tobillos. Nosotros exclamamos: La perdición sea sobre ti, ¿quién eres? E1 respondió: Pronto sabréis de mí, pero decidme ¿quiénes sois vosotros? Ellos dijeron: Somos de Arabia. Viajábamos en un barco y las olas nos azotaron durante un mes, finalmente encontramos refugio en ésta, vuestra isla. Desembarcamos en ella y nos encontramos una bestia que era tan cabelluda que no podíamos distinguir su cara de su parte de atrás, debido a la cantidad de pelo. Nosotros le dijimos: La perdición sea sobre ti, ¿quién eres? y ella nos dijo: Yo soy Al Yassásah. Le preguntamos ¿qué es Al Yassásah? Y ella dijo: Buscad a este hombre en el templo, pues él está ávido de las noticias que le proveáis. Así que vinimos rápidamente aquí, huyendo de esa bestia, porque no estábamos seguros de que no era un demonio.
Él dijo: Informadme acerca de las palmeras de Baisán.
Nosotros dijimos: ¿Qué quieres que te digamos sobre ellas? Él dijo: Os estoy preguntando si están produciendo frutos. Dijimos: Sí. Él dijo: Pronto éstas no producirán frutos. Informadme acerca del lago de Tabariiah (Tiberias]). Nosotros dijimos: ¿Qué quieres que te digamos acerca de él? Él dijo: ¿Todavía hay agua en él? Ellos dijeron: Tiene mucha agua. Él dijo: Pronto su agua se habrá ido.
Él dijo: Informadme acerca de la fuente de Zugar. Ellos dijeron: ¿Qué quieres saber sobre ella? Él dijo: ¿Las personas aún usan su agua para la irrigación? Nosotros le dijimos: Sí, tiene mucha agua, y las personas la usan para la irrigación. Él dijo: Informadme acerca del Profeta de los iletrados, ¿qué ha hecho? Nosotros dijimos: El ha salido de Makkah y se ha establecido en Iazrib. Él dijo: ¿Los árabes luchan contra él? Nosotros dijimos: Sí. Él dijo: ¿Qué ha hecho con ellos? Nosotros le dijimos que él había vencido a aquellos que viven en las cercanías y que éstos se habían sometido. Él dijo: ¿Eso ya pasó? Nosotros dijimos: Sí. Él dijo: Si eso ya pasó, entonces es mejor para ellos que lo obedezcan. Yo os diré sobre mí: Yo soy el Masih (el Dayyál), y pronto se me concederá el permiso para surgir. Yo surgiré y viajaré por toda la Tierra , y no habrá ciudad donde no me quedaré durante cuarenta días, salvo Makkah y Taibah, pues me han sido prohibidas. Siempre que quiera entrar en una de ellas, seré interceptado por un Ángel en cuya mano hay una espada desenfundada y obstruirá mi camino. En cada paso de montaña habrá Ángeles protegiéndola.”
El Mensajero de Allah(sala Allahu alayhi wa salam) dijo, golpeando el Minbar con su bastón: “Esta es Taibah, ésta es Taibah, ésta es Taibah, significando Al Madinah. ¿Acaso no os he dicho cosas similares (sobre el Dayyál)?” Las personas dijeron: Sí. [El Profeta (sala Allahu alayhi wa salam)dijo:] “Me agrada el relato de Tamim ya que concuerda con lo que os he informado sobre él (el Dayyál), Al Madinah y Makkah. ¿Está el Dayyál en el mar sirio (el Mediterráneo) o en el mar yemenita (el Océano índico)? ¡Claro que no! él está hacia el Este, él está hacia el Este, él está hacia el Este.” e indicó con su mano hacia el Este. Ella (Fátímah Bint Qais) dijo: ‘Yo memoricé estas palabras del Mensajero de Allah(sala Allahu alayhi wa salam)’
Este Hadiz indica claramente que Ibn Saiiád no era el Dayyál mayor, y que el Dayyál mayor está siendo retenido en alguna isla en el mar. Quizás, como algunos de los estudiosos han sugerido, él sea uno de los demonios que fueron detenidos por el Profeta Sulaímán (Salomón), porque es improbable que un humano permanezca vivo por tanto tiempo. Y Allah es el que mejor sabe lo que es correcto.

Nota: otro articulo donde trato el tema del dajjal http://anderbal.blogspot.com.es/2012/08/el-dajjal-el-anticristo.html









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